Refrescante y deliciosa, la granada es una de las frutas que protagonizan muchas ensaladas de verano. Pero además de ser un ingrediente ideal de la dieta mediterránea, aporta muchos beneficios a tu salud. ¿Los conoces? Descúbrelos en este artículo.

• Es un alimento rico en vitaminas C y B2, B9.
• Contiene minerales como potasio, hierro, zinc, cobre, selenio, magnesio y calcio
• Aporta gran cantidad de hidratos de carbono.
• Rica en antioxidantes (como el betacaroteno).
• Tiene gran cantidad de fibra (aunque su elevado contenido en taninos puede frenar la diarrea y perjudicar el estreñimiento).

• Reduce los niveles de colesterol malo gracias a los polifenoles que contienen.
• Tratan la arteriosclerosis: Tomar zumo de granada al día durante un año disminuye las lesiones por aterosclerosis en un 35%.
• Previene la aparición de la osteoartritis.
• Proteger la piel contra los efectos negativos de los rayos UV y regenera la dermis.
• Frena la progresión del cáncer de próstata o pulmón. por sus propiedades naturales antiinflamatorias y su alto contenido de antioxidantes que pueden reducir el crecimiento de células cancerosas.
• Aporta beneficios en enfermedades como la diabetes o el Alzheimer.
• Algunos estudios científicos han demostrado que las semillas de la granada son un poderoso afrodisíaco, con efectos similares a los  de la viagra.
• Limpian los riñones, gracias a su alto contenido en potasio.
• Baja la tensión arterial alta por su contenido en antioxidantes.

El consumo excesivo de granada puede causar:

• Intoxicación

  Sus síntomas son mareos, náuseas, malestar estomacal, dolor de cabeza y dificultad para respirar.

• Puede inhibir el efecto de algunos medicamentos

  Puede aumentar los efectos secundarios de ciertos medicamentos. Es el caso de los medicamentos para la tensión arterial alta o la rosuvastatina. Antes de tomar la granada hay que ponerse en contacto con el médico.

• Alergias

  Aparición de determinadas alergias que pueden provocar erupciones, hinchazón de la cara y de la boca, urticarias o dificultad para tragar o respirar normalmente.